Antonia Quiros Egido was one of twenty children. She had one daughter and two grandchildren. She joined the Mormon church at 65 years old and was known to all by the nickname of the "Abuela". I am her grandson who was blessed enough to hold her in my arms when she passed away on a dreary Christmas night. She was loved very much, and I can still feel her very close to me, although her death ruined all future Christmas days for our family.
Her remains lie in her beloved Madrid, yet her love, memories and spirit linger forever in many hearts.
Antonia Quiros Egido fue mi abuela fisicamente hasta una lluviosa mañana de navidad en 1995, en la que tuve la bendicion de tenerla entre mis brazos, tal y como ella lo habia querido, al dar su ultimo suspiro. Ahora continua siendo mi abuela, pero en un plano más eterno y profundo. Dejó detras de si un rio de recuerdos y anecdotas...algunas buenas, otras no tanto...pero siempre con ese amor que solo las abuelas saben dar. Su persona será siempre extrañada, mas su presencia perdura eternamente en todos nosotros. Siempre que lo deseo...viene a consolarme, a escucharme, a darme consejos, a ser mi abuela. Ella me ilumina el camino que debo seguir, y en si me protege y guia en todo momento de mi vida. Ahora mismo la siento a mi lado, asintiendo con la cabeza. Eres eterna, y estaremos juntos ayer, hoy y siempre!!
Hasta Pronto, Abu....Para siempre Dios esté con vos!
Y con mi Baby, que murío en mis brazos el 8 agosto del 2003 a los 18 años de lealtad y compañia, y se fue, tal y como la indiqué en ese momento, con la Abu...os quiero a las dos...mi inspiracion y mi luz! ¡¡Para Siempre Dios esté con vos!!
Her remains lie in her beloved Madrid, yet her love, memories and spirit linger forever in many hearts.
Antonia Quiros Egido fue mi abuela fisicamente hasta una lluviosa mañana de navidad en 1995, en la que tuve la bendicion de tenerla entre mis brazos, tal y como ella lo habia querido, al dar su ultimo suspiro. Ahora continua siendo mi abuela, pero en un plano más eterno y profundo. Dejó detras de si un rio de recuerdos y anecdotas...algunas buenas, otras no tanto...pero siempre con ese amor que solo las abuelas saben dar. Su persona será siempre extrañada, mas su presencia perdura eternamente en todos nosotros. Siempre que lo deseo...viene a consolarme, a escucharme, a darme consejos, a ser mi abuela. Ella me ilumina el camino que debo seguir, y en si me protege y guia en todo momento de mi vida. Ahora mismo la siento a mi lado, asintiendo con la cabeza. Eres eterna, y estaremos juntos ayer, hoy y siempre!!
Hasta Pronto, Abu....Para siempre Dios esté con vos!
Y con mi Baby, que murío en mis brazos el 8 agosto del 2003 a los 18 años de lealtad y compañia, y se fue, tal y como la indiqué en ese momento, con la Abu...os quiero a las dos...mi inspiracion y mi luz! ¡¡Para Siempre Dios esté con vos!!
Antonia Quiros Egido was one of twenty children. She had one daughter and two grandchildren. She joined the Mormon church at 65 years old and was known to all by the nickname of the "Abuela". I am her grandson who was blessed enough to hold her in my arms when she passed away on a dreary Christmas night. She was loved very much, and I can still feel her very close to me, although her death ruined all future Christmas days for our family.
Her remains lie in her beloved Madrid, yet her love, memories and spirit linger forever in many hearts.
Antonia Quiros Egido fue mi abuela fisicamente hasta una lluviosa mañana de navidad en 1995, en la que tuve la bendicion de tenerla entre mis brazos, tal y como ella lo habia querido, al dar su ultimo suspiro. Ahora continua siendo mi abuela, pero en un plano más eterno y profundo. Dejó detras de si un rio de recuerdos y anecdotas...algunas buenas, otras no tanto...pero siempre con ese amor que solo las abuelas saben dar. Su persona será siempre extrañada, mas su presencia perdura eternamente en todos nosotros. Siempre que lo deseo...viene a consolarme, a escucharme, a darme consejos, a ser mi abuela. Ella me ilumina el camino que debo seguir, y en si me protege y guia en todo momento de mi vida. Ahora mismo la siento a mi lado, asintiendo con la cabeza. Eres eterna, y estaremos juntos ayer, hoy y siempre!!
Hasta Pronto, Abu....Para siempre Dios esté con vos!
Y con mi Baby, que murío en mis brazos el 8 agosto del 2003 a los 18 años de lealtad y compañia, y se fue, tal y como la indiqué en ese momento, con la Abu...os quiero a las dos...mi inspiracion y mi luz! ¡¡Para Siempre Dios esté con vos!!
Her remains lie in her beloved Madrid, yet her love, memories and spirit linger forever in many hearts.
Antonia Quiros Egido fue mi abuela fisicamente hasta una lluviosa mañana de navidad en 1995, en la que tuve la bendicion de tenerla entre mis brazos, tal y como ella lo habia querido, al dar su ultimo suspiro. Ahora continua siendo mi abuela, pero en un plano más eterno y profundo. Dejó detras de si un rio de recuerdos y anecdotas...algunas buenas, otras no tanto...pero siempre con ese amor que solo las abuelas saben dar. Su persona será siempre extrañada, mas su presencia perdura eternamente en todos nosotros. Siempre que lo deseo...viene a consolarme, a escucharme, a darme consejos, a ser mi abuela. Ella me ilumina el camino que debo seguir, y en si me protege y guia en todo momento de mi vida. Ahora mismo la siento a mi lado, asintiendo con la cabeza. Eres eterna, y estaremos juntos ayer, hoy y siempre!!
Hasta Pronto, Abu....Para siempre Dios esté con vos!
Y con mi Baby, que murío en mis brazos el 8 agosto del 2003 a los 18 años de lealtad y compañia, y se fue, tal y como la indiqué en ese momento, con la Abu...os quiero a las dos...mi inspiracion y mi luz! ¡¡Para Siempre Dios esté con vos!!
